Qué ver en Teruel Capital y Provincia
De la capital turolense, pasando por Albarracín o comarcas tan pintorescas como el Matarraña, la provincia de Teruel tiene un compendio de atractivos turísticos que merece mucho la pena visitar. De hecho, en este artículo te voy a mostrar los principales lugares que ver en Teruel capital y provincia, una zona que conozco especialmente bien, ¡prepárate!
Como aragonés, he vivido muchos debates estériles, debido a las riñas “entre vecinos”. ¿Es más bonito Zaragoza o Huesca? Muchos te dirán que de Zaragoza merece la pena su ciudad, mientras que no hay demasiados atractivos en el resto de la provincia. Otros te dirán que la ciudad de Huesca no tiene mucho que mostrar, pero que más allá de la ciudad tiene innumerables rincones que conocer.
Tal vez te interese saber Qué ver en Huesca provincia y capital.
En ambos casos, creo que no es cierto. Sin embargo, todo el mundo está de acuerdo en una cosa, tanto la ciudad de Teruel como su provincia son espectaculares, ¡en eso sí estoy de acuerdo!
Teruel es la provincia en la que está mi pueblo. Gracias a ello, he tenido la oportunidad de conocer en profundidad cada uno de los lugares de Teruel que te voy a comentar. Por cierto, si quieres saber cuál es ese pueblo, te hablaré en un artículo próximamente, ¡no te preocupes!
Ahora, sí que sí, ¡vamos al lío! A continuación, te voy a halar de aquellos lugares y zonas que visitar en Teruel.
8 Lugares que ver en la capital de Teruel
Comenzamos con la capital de la provincia. Teruel es una pequeña ciudad, como bien sabes. Ahora bien, ¿sabías que es la capital de provincia más pequeña de toda España? Así, como lo oyes, tiene apenas 36.000 habitantes.
Si por ello piensas que no hay mucho que ver en Teruel, estás totalmente equivocado. Cada rincón de la ciudad es maravilloso, ¡un pedazo de historia! En particular, la ciudad de Teruel es conocida por albergar un inmenso patrimonio mudéjar. Es más, gracias a ello es Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO, desde hace más de 35 años.
¿Quieres descubrir qué monumentos están dentro de ese listado, así como otros lugares de interés? ¡Continúa leyendo!
1. Catedral de Santa María de Mediavilla
Como en la mayoría de las ciudades, la catedral es uno de los monumentos más impactantes y, en el caso de Teruel, no iba a ser menos. Precisamente, hablamos de una de las construcciones mudéjares más características de toda España y una de las pocas de todo el país con este estilo predominante.
Eso sí, la estructura original de la catedral se erigió en a finales del siglo XII, de estilo románico. No fue hasta mediados del siglo XIII cuando se levantó su famosa torre mudéjar, decorada con azulejos y cerámica vidriada.
Tras la torre, surgieron nuevas ampliaciones típicas de la época gótica, como la elevación de las alturas, manteniendo, eso sí, su estilo. De la época renacentista se conserva otro de los elementos más interesantes de la catedral: su cimborrio mudéjar. Te recomiendo no solo ver la catedral desde fuera, su vista al interior de dejará con la boca abierta, sobre todo al alzar la vista a la techumbre de la nave central, considerada como “la capilla Sixtina del mudéjar”, ¡imprescindible!
2. Plaza del Torico
Es la plaza más popular de Teruel, conocida por ser el epicentro de las fiestas patronales, en las que colocan el pañuelo “al torico”. Al igual que sucede con otros monumentos, sorprende por sus reducidas dimensiones. Apenas medio metro de escultura, en lo alto de una fuente.
Sin embargo, es la zona que más vida desprende la ciudad, al menos de día. Diversos bares y restaurantes donde poder tomarse algo, junto con edificios realmente interesantes de estilo modernista.
3. Escalinata del Óvalo
Probablemente, debido a sus dimensiones y ubicación, se tratará del primer lugar interesante que veas en la ciudad turolense, puesto que es la encargada de conectar la estación de ferrocarril con el casco antiguo, a través del Paseo del Óvalo, de ahí su nombre.
Una escalera que es santo y seña de la ciudad, a pesar de que cuenta con apenas un siglo de vida. Efectivamente, fue construida en 1921 por el ingeniero José Torán de la Rad, en un claro estilo neomudéjar.
En la parte central de la espectacular escalinata, entre los azulejos y ladrillos de esta obra podemos, encontrar el principal detalle, el altorrelieve en honor a Los Amantes de Teruel, realizada por el escultor segoviano Aniceto Marías.
4. Torre de El Salvador
Dentro del patrimonio mudéjar de Teruel, cabe resaltar sus famosas torres. Una que te recomiendo visitar es, sin lugar a dudas, la Torre de El Salvador. Construida como unión de los portales de Zaragoza y Guadalaviar en el siglo XIV. Posteriormente, fue adosada a la iglesia que lleva su mismo nombre y que se reconstruyó en el siglo XVII.
La torre destaca por su ornamentación y elementos decorativos, especialmente por su bóveda de crucería. Consta de 4 plantas, siendo la última un imponente campanario, al cual puedes subir, es uno de los mejores miradores de Teruel. Además, en su interior se encuentra el Centro de Interpretación del Mudéjar turolense.
5. Torre de San Martín
Ahora, vamos con la otra torre mudéjar de referencia de Teruel: la de San Martín. En este caso, los historiadores creen que se construyó unos años antes que la Torre de El Salvador. Era una antigua morería de la ciudad y que daba paso al portal de Daroca. Su función principal era la de vigilar toda la villa.
Cuenta la leyenda que Omar, el alarife de la torre, competía por el amor de una dama con el constructor de la Torre de El Salvador: Abdalá. Finalmente, el padre de la dama, llamada Zoraida, decidió que sería el primero en terminar de construir la torre más bella el que se casara con la joven. Si bien es cierto que la de San Martín se levantó en menos tiempo, estaba levemente torcida, por lo que Omar, enojado, subió a lo más alto de la torre y tiró a la calle.
6. Acueducto de Los Arcos
No, no es tan conocido como e l Acueducto de Segovia, pero el acueducto turolense es también impresionante. Fue construido a mediados del siglo XVI, con el objetivo de llevar el agua del manantial de la peña del Macho a la ciudad.
Caracterizado por sus dos alturas y sí, por sus arcos -valga la redundancia-, es una de las obras de la ingeniería civil renacentista más importantes de toda España, ¡ahí es nada! El encargado de su construcción fue Quinto Pierres Bedel, el cual realizó otra labor importante en el patrimonio monumental de Teruel: recalzar la Torre de San Martín.
7. Iglesia y Torre de San Pedro
Dentro del extenso patrimonio que ver en Teruel, no podía faltar la Iglesia de San Pedro y su torre, la más antigua de todas las que hay en la ciudad, construida en el último tercio del siglo XIII y, por lo tanto, de un estilo más primitivo.
Se adosó posteriormente a la iglesia, la cual data del siglo XIV, con un marcado estilo gótico. Es totalmente recomendable descubrir su interior, redecorado entre los siglos XIX-XX de un magnífico estilo modernista neomudéjar. De la misma forma, en una de las capillas se encuentran los Amantes de Teruel, probablemente los amantes más famosos de España.
8. Dinópolis
En este caso, está en las afueras de la ciudad de Teruel y es uno de los mejores lugares para ir con niños, ¡y no tan niños! Es un espacio divulgativo en el que conocer los dinosaurios que poblaron estas tierras y mucho más.
En Dinópolis Teruel se encuentra el museo paleontológico de Teruel, en los que poder ver más de 1.000 piezas de huesos de dinosaurios, destacando el Turiasaurus Riodevensis, el dinosaurio más grande de toda Europa.
Qué hacer en la provincia de Teruel y su entorno
Si te has quedado de piedra con todo lo que puedes ver en la ciudad de Teruel, vas a alucinar con todo lo que puedes descubrir en el resto de la provincia. Es más, es imposible hablarte de absolutamente todo, ¡te lo aseguro!
La provincia de Teruel está repleta de bellísimos pueblos, en cualquiera de sus comarcas. Más de 10 de estos pueblos están declarados conjunto histórico-artístico y es la provincia que tiene más localidades dentro de la Asociación de los Pueblos más Bonitos de España. La riqueza natural también te sorprenderá, con lugares únicos para una excursión, ¡ahora lo verás!
1. Albarracín
Sí, es muy típico comenzar hablando de Albarracín, ¡pero es que es una pasada! Situado a orillas del río Guadalaviar, sobre los Montes Universales, emerge esta villa medieval, con sus impresionantes casas de fachada roja, una característica habitual de la Sierra de Albarracín, así como la muralla que aun hoy en día protege la localidad.
Caminar por sus calles es literalmente volver a la Edad Media. Entre sus calles empinadas podrás descubrir casas tan singulares como la Casa de la Julianeta, conocida por su inclinación, o la casa azul, destacada por su fachada tan distinguida.
El catálogo patrimonial es excelso, con lugares como la Catedral de San Salvador, el Palacio Episcopal o el antiguo alcázar, además de la famosa torre del Andador, situado en lo alto de la muralla y desde donde poder ver todo el pueblo en su máximo esplendor.
2. Pinares de Rodeno
Teruel está compuesto de paisajes de o más singulares. Uno de ellos es, sin lugar a dudas, los Pinares de Rodeno, uno de los imprescindibles de la Sierra de Albarracín. Sus sinuosas rocas de color rojizo, moldeadas por el viento con formas de lo más curiosas.
Asimismo, te impresionará los pinares que crecen junto a estas rocas, ¡algunos de los pinos llegan a coronar estas majestuosas montañas! Una zona de lo más sorprendente, en la que te invito a realizar alguna ruta en la que descubrir sus cuevas y sus pinturas rupestres, declaradas Patrimonio Mundial de la UNESCO.
3. Ojos de Cabriel y Cascada del Molino de San Pedro
El río Cabriel, en muchos de sus tramos, es realmente bello, desde su nacimiento. Efectivamente, el Cabriel nace en los Montes Universales, en el término municipal de El Vallecillo. De hecho, los Ojos del Cabriel, el lugar oficial de su nacimiento, es un lugar muy bello y tranquilo.
Si decides visitarlo, puedes realizar una increíble ruta siguiendo el curso del río, hasta llegar a otro de los lugares más interesantes de la zona: la Cascada del Molino de San Pedro. Una de las cascadas más impactantes de la provincia, tanto por su preciosa caída, como por su sonido ensordecedor.
4. Valderrobres
Valderrobres es otro de los pueblos de referencia de Teruel. En este caso, es la capital de la comarca del Matarraña. El casco antiguo de esta localidad te dejará sin palabras desde el primer momento.
Solo hay que pararse en la entrada del mismo, en su precioso puente medieval, para poder comprobarlo. Desde ahí, ya se ven las casas antiguas que bordean el río Matarraña, la entrada del Portal de San Roque, además de su imponente castillo y la torre de la iglesia, situados en lo alto de la localidad.
Te invito a que pases por esa puerta y te dejes sorprender por Valderrobres, entrando en la Plaza de España donde destacan su ayuntamiento y la antigua fonda. Pasea por sus estrechas calles, ascendiendo poco a poco, hasta llegar a la fabulosa iglesia de Santa María la Mayor y el castillo-palacio de la localidad.
5. Castillo de Peracense
Hay muchos castillos increíbles en la provincia de Teruel, pero si solo tuvieras tiempo para visitar uno detenidamente, te recomendaría al 100% que fuera el Castillo de Peracense. Enclavado en lo alto de un risco, es un castillo de lo más pintoresco.
La razón es que sus murallas rojizas se unen a la roca de rodeno de forma casi hipnótica, aprovechando la difícil orografía para crear una fortaleza irregular e inexpugnable, al mismo tiempo. A pesar de que fue construido en el siglo XIV, se han encontrado restos de asentamientos de la Edad de Bronce, ¡casi nada!
6. El Parrizal de Beceite
Otro de los puntos de mayor interés de la comarca del Matarraña es el Parrizal de Beceite. En esta zona, el cañón que atraviesa el río Matarraña se estrecha súbitamente, creando una zona de singular belleza, en la que se crean pozas de agua turquesa. Parte de su belleza es el resultado del especial cuidado que hay dentro de este paraje, con normas muy estrictas, ¡tenlo en cuenta!
Por ejemplo, el baño está totalmente prohibido, para eso ya hay otra zona con piscinas naturales. Aquí, puedes realizar una preciosa ruta, siguiendo unas pasarelas en las paredes del cañón, que te dejarán anonadado.
7. Museo Minero de Escucha
La zona norte de Teruel es ampliamente conocida por sus minas. De hecho, si no conoces esta provincia, puede que te sorprenda que una de sus comarcas hace referencia a este hecho, como sucede con las Cuencas Mineras.
Si quieres conocer la historia y la identidad tan arraigada del mundo minero, te recomiendo que visites el Museo Minero de Escucha. Aquí, podrás conocer el interior de una mina, en la cual se extraía carbón desde hace 150 años.
Podrás descubrir cómo se trabajaba en la mina, con varios itinerarios, descubriendo diferentes galerías y todas las herramientas que se empleaban. Una vista de lo más didáctica, perfecta para ir con niños.
8. Mirambel
Otro de los sitios de Teruel que ha mantenido todo su encanto ha sido Mirambel. Bueno, para ser sinceros, se podría decir que ese encanto se ha recuperado, puesto que se han llevado a cabo numerosas tareas de restauración que le han devuelto esa belleza que no debería de haber perdido nunca.
Antiguamente, fue un bastión militar clave para la Orden del Temple, configurándose como una villa amurallada de incomparable belleza. Puedes descubrir alguna de las torres fortificadas de la villa, además de lugares como la Iglesia de Santa Margarita o su casa consistorial.
9. Mora de Rubielos y Rubielos de Mora
Mora de Rubielos y Rubielos de Mora. Tan solo 12 kilómetros separan a estas dos localidades que a los foráneos les suele sorprender y confundir, al mismo tiempo. Eso sí, que no te quepa ninguna duda, tienes que visitar ambos, ¡así de claro!
Mora de Rubielos es una localidad que sobresale por su robusto castillo-palacio, el cual se levantó en el siglo XII y se amplió y reformó notablemente entre los siglos XIV y XV. Todas las casas rodean esta fortaleza. También te recomiendo que visites la Colegiata de Santa María, de estilo gótico.
Rubielos de Mora, por otro lado, te maravillara por su conjunto monumental. Mantiene en pie dos de las entradas de la antigua villa, así como joyas de estilo renacentista aragonés, como su ayuntamiento, o del barroco, como es el casto de la Colegiata de Santa María la Mayor.
10. Calaceite
De nuevo, te tengo que hablar de un pueblo de la comarca de Matarraña. Si bien es cierto que hay numerosos pueblos de gran belleza, uno que tienes que descubrir, sí o sí, es Calaceite. El propio camino que te lleva a esta localidad es precioso y te dejará de piedra en cuanto veas su ubicación, situado entre tres cerros.
El legado medieval de Calaceite es impecable, tanto por sus calles, como los diferentes monumentos o las casas señoriales que puedes descubrir. Entre estos lugares destacados, se encuentra la iglesia de la Asunción o su casa consistorial, donde se encuentra la antigua cárcel.
11. Cantavieja
Cantavieja es uno de los pueblos más conocidos de la comarca del Maestrazgo. Un bonito pueblo enclavado sobre un cerro, un punto estratégico por el cual el pueblo ha sido protagonista en multitud de conflictos, como en las Guerras Carlistas.
Una localidad que ha conservado su trazado urbano igual desde hace 8 siglos, donde la piedra es la gran protagonista. Te recomiendo que pasees tranquilamente por sus calles y detenerte, en especial, en la iglesia barroca de la Asunción, así como su casa consistorial o el Museo de las Guerras Carlistas.
12. Estrechos del Río Martín
El tramo medio del Río Martín es otro de los parajes naturales de Teruel que merece la pena descubrir. Me refiero, en este caso, en el tramo que discurre en torno a la localidad de Albalate del Arzobispo y que se enclava dentro del Parque Cultural del Río Martín.
Si quieres disfrutar de un día en plena naturaleza, te aconsejo que realices el sendero de los estrechos, la cual transcurre por cortados rocosos. En el trayecto, podrás descubrir pinturas rupestres. En verano, también puede ser perfecto incluso si buscas darte un chapuzón, puesto que en esta zona hay numerosas pozas y cascadas.
Dónde comer en la ciudad y cerca de Teruel
Ya habrás podido comprobar que hay mucho que ver en Teruel, ya sea en la ciudad, como en el resto de la provincia. Desde la capital a los pueblos, pasando por sus parajes naturales, ¡y eso que me he dejado numerosos lugares en el tintero!
La gastronomía es otro de los puntos fuertes de la provincia turolense. Algunas de las comidas más típicas de Teruel son el gazpacho turolense, las sollapas, madejas o el exquisito Jamón de Teruel.
Si eres celiaco, en este artículo te hablo sobre algunos de los restaurantes sin gluten de Teruel.
Tal y como puedes comprobar, algunos de estos restaurantes están no solo en la ciudad, como es obvio, sino en otros de los lugares que he comentado en este post, como Albarracín, Dinópolis o Mora de Rubielos. Verás que, si eres celiaco, no tendrás ningún problema en encontrar un restaurante gluten free.
Otros productos típicos de Teruel son el Queso de Albarracín, el Queso Artesano El Rodeno o el melocotón de Calanda y, lo mejor de todo es que no llevan gluten.
¿Qué te ha parecido este listado de lugares que ver en Teruel? Seguro que algunos de estos sitios te resultan sorprendentes. ¿Echas alguno en falta? No dudes en comentar y compartir tu experiencia conmigo.
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